Querida Sandra:
Desde que el viernes tu padre fue cobardemente asesinado en tu presencia y la de tu madre, no he dejado de pensar en vosotras y en tus hermanos. Hace 28 años -tú todavía no habías nacido y probablemente el que descerrajó los tiros contra tu padre tampoco- mi padre murió de la misma forma, tiroteado delante de mis hermanas.
El sábado 17 de Mayo de 2008, la Fundación DENAES inauguró en Madrid el Monumento a las Víctimas del Terrorismo en la plaza de la República Dominicana, lugar donde el 24 de julio de 1986, doce guardias civiles murieron a manos de la banda terrorista ETA.
Entre las autoridades y personalidades que presidieron el acto destacamos a la presidenta de la Comunidad de Madrid, doña Esperanza Aguirre; el alcalde de la capital, don Alberto Ruiz-Gallardón; el presidente del Foro Ermua, Iñaki Ezquerra; el presidente de la AVT, Juan Antonio Casquero, etc.
El acto de inauguración fue muy concurrido y emotivo; y especialmente intensas y aplaudidas fueron las intervenciones de Santiago Abascal, presidente de la Fundación para la Defensa de la Nación Española, y de su vicepresidente Ricardo Garrudo.
La iniciativa de hacer un monumento a las víctimas tuvo como detonante la excarcelación del asesino Iñaki De Juana Chaos y su traslado a un hospital del País Vasco que la gran mayoría de los españoles entendieron como “gesto” o “cesión” del Gobierno de la Nación en el marco de la negociación con la banda terrorista ETA, cuando todavía le quedaba por cumplir casi un año de su rebajada condena por amenazas.
En los días posteriores a la excarcelación y en forma de homenaje espontáneo, multitud de personas anónimas depositaban flores en la Plaza de la República Dominicana en Madrid y en otros puntos donde Iñaki De Juana Chaos había asesinado.
El Patronato de la Fundación Denaes decidió tomar la iniciativa de dar carácter permanente a este homenaje espontáneo convirtiéndolo en un homenaje permanente en forma de monumento en la Plaza de la República Dominicana y de placas conmemorativas en el resto de los puntos.
El monumento, financiado por suscripción popular, fue creado por el artista Pedro Requejo en bronce, con forma de vértice (3,10 metros de alto x 2,20 de ancho) y presidido por una figura de la libertad que enarbola la bandera nacional. La sigue una víctima del terrorismo y decenas de españoles. - Fuente Denaes
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