Las plataformas de presos de ETA, acompañadas de numerosas organizaciones sindicales, han organizado para este viernes, 30 de junio, un desfile callejero con música para festejar el fin de la política de dispersión puesta en marcha por Pedro Sánchez. Un logro alcanzado en este 2023 tras cuatro años de acercamientos impulsados y ejecutados por el Gobierno socialcomunista, facilitados a cambio del apoyo parlamentario de EH Bildu al PSOE.
Fuente - La Audiencia Nacional condenó este miércoles a dos años de prisión a Gaizka Andoni Astorquizaga y a Valentina Liliana Morisoli (de nacionalidad suiza) por quemar en noviembre de 2020 dos máquinas expendedoras de billetes en sendas estaciones de tren. Aunque la Fiscalía solicitó inicialmente cuatro años de cárcel para ellos, tras reconocer los hechos y acordar pagar los desperfectos, el ministerio público pactó rebajarles la pena y no pisarán finalmente ningún centro penitenciario.
Lo primero, además de celebrar que pueda estar hoy en Sevilla y en su Ayuntamiento (gracias Alcalde por acogernos), es agradecer muy sinceramente a la Fundación que me haya concedido este “Premio contra el Terrorismo Alberto Jiménez-Becerril”. Es para mí un honor muy grande que, además, quiero compartir con todos los españoles porque (permitidme que así lo diga) lo considero esencialmente un reconocimiento para el conjunto de nuestra sociedad; una sociedad que ha sufrido el terror pero que siempre confió en la dignidad de las víctimas, en solidaridad de todos los españoles y en la fortaleza del Estado de Derecho para hacer frente con eficacia al terrorismo.
Fuente- Tres etarras han sido investidos como alcaldes en el País Vasco gracias a EH Bildu. Se tratan de Urtza Alkorta, Andoni Lariz y Ergoitz Garmendia que han conseguido ser regidores de Ondarroa, Cenarruza-Bolívar y Ochandiano, respectivamente. Los tres fueron condenados por pertenecer a ETA con penas de cárcel por su colaboración con los comandos terroristas. Sin embargo, ahora ganarán un sueldo público gobernando instituciones municipales tras haber sembrado el terror en España. Lo hacen de la mano de la formación política EH Bildu, uno de los socios preferentes de Pedro Sánchez con los que pactó su investidura y cuyos votos han sido claves para sacar adelante proyectos del Gobierno socialcomunista.
No tienen vergüenza. Ni su jefe Pedro Sánchez, ni toda la panda de ganapanes que engordan en el PSOE a cuenta del sufrido ciudadano español.
Los proetarras de Bildu, esa coalición de partidos herederos de una banda de asesinos que, según el delegado del Gobierno en Madrid, ha hecho tanto por los españoles, ha conseguido que el PSOE pase por el aro de los etarras y apoye, junto al PNV, el proyecto de Ley de Memoria Histórica y Democrática en el País Vasco.
Mientras critica los pactos del Partido Popular y Vox, el PSOE no tiene reparo alguno en sentarse a negociar con Bildu, partido convertido en el aliado preferente de Pedro Sánchez y cuyo apoyo ha resultado determinante para el socialista a lo largo de la legislatura. Tanto es así, que el PSOE ya ha mantenido un encuentro con la formación proetarra para la investidura de María Chivite como presidenta de Navarra. La delegación de los socialistas estaba encabezada por la propia Chivite, mientras que por Bildu acudieron la candidata a la Presidencia, Laura Aznal, el parlamentario Adolfo Araiz y Miren Zabaleta, responsable política de la formación en Navarra. Araiz, histórico dirigente proetarra, fue miembro de la Mesa Nacional de Herri Batasuna entre 1991 y 1997 y llegó a ingresar en prisión por colaboración con banda armada en la sentencia dictada por el Tribunal Supremo contra los 23 miembros de la Mesa Nacional, que luego fue anulada por el Tribunal Constitucional al entender que no existían pruebas. Permaneció año y medio en la cárcel.
Miren Zabaleta durante el homenaje al etarra Xabi Rey en 2018 EFE
15/06/2023 - FuenteHubo muchas sonrisas, incluso risas, en la reunión que el pasado martes mantuvo una delegación del PSOE navarro encabezado por su secretaria general y candidata a presidir Navarra, María Chivite, y una representación de Bildu en la que también estaba la candidata abertzale, Laura Aznal, y la coordinadora general de Bildu en Navarra, Miren Zabaleta.
Fuente - El PSOE está jaleando las últimas declaraciones de José Luis Rodríguez Zapatero sobre ETA para atribuirse su disolución durante su Gobierno. El ex presidente dice que fue él quién logró el fin de la banda armada. Quieren así intentar desmontar el discurso de la derecha sobre la transformación del grupo armado en un partido político a manos de Bildu. Y no lo han conseguido.
Los socialistas han quedado completamente retratados por las propias víctimas de ETA y el ex presidente del Gobierno desenmascarado. «Mi Gobierno. Sí, lo digo. Bajo mi Gobierno, se terminó ETA, se entregó ETA, se rindió ETA. Lo digo y lo afirmo. Creo que puedo ser la persona que más datos tenga. Sí, lo fue. La historia va a constar así», decía ayer Zapatero con total rotundidad.
Unas declaraciones que han sido cuestionadas por el Colectivo de Víctimas del Terrorismo, Covite, que defiende que lo que hizo Zapatero no fue acabar con ETA, si no negociar que dejaran de matar para legalizarlos: «ETA no ‘se rindió’ bajo su Gobierno. Negoció las condiciones para su final. ¿Y qué es una negociación, sino dar algo a cambio de otra cosa?»
Covite ha señalado que en esa negociación entre el Gobierno y ETA el precio fue la «legalización» de los «brazos políticos» de la banda, además de garantizar «impunidad y un final sin vencedores ni vencidos». «Ese fue el precio», ha criticado.
El Gobierno renunció a impugnar la designación de 44 terroristas en las candidaturas electorales de Bildu, a pesar de que la Ley de Partidos considera esa decisión, textualmente, como causa de ilegalización.
Así consta en un escrito en posesión de El Debate firmado por la Directora de Coordinación Técnica y Jurídica de la Presidencia del Gobierno, Beatriz Rodríguez Pérez, fechado el pasado 22 de mayo, en el que reconoce literalmente que «no existe documento o contenido en poder de este órgano» que recoja algún intento de Sánchez de frenar la intentona del partido de Arnaldo Otegi por situar a etarras en instituciones municipales del País Vasco como cargos públicos.
La pelota está sobre el tejado de las autoridades francesas. La causa múplitple que, hace unos meses, arrancaba en la Audiencia Nacional –a partir de una denuncia de la asociación de víctimas Dignidad y Justicia–para investigar la «autoría mediata» de varios de los atentados más graves cometidos por la banda terrorista ETA, como el secuestro y asesinato del concejal del Partido Popular de Ermua, Miguel Ángel Blanco, se está viendo retrasada, entre otras cuestiones, por la ausencia de un juez de enlace con Francia. Así las cosas, el magistrado instructor Manuel García-Castellón se ve en la tesitura de tener que triangular todas sus consultas al país vecino a través de su excompañero el juez José de la Mata, miembro nacional de España en Eurojust, desde noviembre de 2020, a propuesta del exministro de Justicia Juan Carlos Campo.