Enlace al Blogger - Las Víctimas de ETA

lunes, 28 de marzo de 2022

Este mapa puede condenar a los jefes de ETA por el asesinato del juez del Supremo Querol 20 años después

Fuente OKDiario Veinte años después, unos tachones a bolígrafo sobre un mapa de Madrid incautado en una operación antiterrorista en Francia le pueden salir muy caro a la cúpula de ETA en el año 2000. Las marcas coinciden, exactamente, con la ubicación de varios atentados de la banda en la capital. Entre ellos, el que costó la vida al magistrado del Tribunal Supremo José Francisco de Querol y Lombardero, a su escolta y a su chófer.

sábado, 26 de marzo de 2022

Las víctimas de ETA retirarán la medalla que dieron a Marlaska cuando era juez

Al grito de «solo muere lo que olvidas» inauguró el acto de este sábado en la plaza madrileña de Colón el periodista Abert Castillón. Cientos de personas se reunieron en nombre de las víctimas de ETA precisamente para esto, para reivindicar que no olvidan y lo hicieron bajo el paraguas organizador de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y algunos otros paraguas con los colores de España que protegían de la lluvia y el frío. 


La macabra huella de ETA en Madrid


EL MUNDO recorre con María Jesús González, madre de Irene Villa, varios de los lugares donde ETA sembró de muerte Madrid, incluido el atentado con coche bomba en el que el 17 de octubre de 1991 ella misma perdió un brazo y una pierna y su hija las dos piernas y tres dedos de la mano izquierda por una bomba que ETA puso en su coche.

Marimar Blanco zarandea a Sánchez en la previa de la gran marcha de la AVT


Marimar Blanco zarandea a Sánchez en la previa de la gran marcha de la AVT - Periodista Digital: La hermana de Miguel Ángel Blanco deja en evidencia al presidente del Gobierno socialcomunista por su entreguismo a los herederos políticos de la banda terrorista ETA

jueves, 24 de marzo de 2022

“Solo los etarras ‘fieles’ reciben ayudas y subvenciones”


Los presos de ETA ‘fieles’ reciben ayudas jurídicas, económicas y sanitarias. Se trata de una extorsión -la trama Kalera Kalera- investigada por la Audiencia Nacional, que no solo coordina los homenajes a etarras sino que agiliza sus progresiones y gestiona ayudas a los terroristas de la banda criminal.

lunes, 21 de marzo de 2022

Maite Araluce (AVT): «Las víctimas de ETA no podemos aguantar más el desprecio y la traición»


La presidenta de la AVT llama a participar en la manifestación del 26 de marzo en Madrid bajo el lema «No todo vale, Gobierno traidor. Justicia para las víctimas del terrorismo».

viernes, 4 de marzo de 2022

José María Portell Manso

A las nueve menos cuarto de la mañana del 28 de junio de 1978, la banda terrorista ETA asesinaba a tiros en Portugalete (Vizcaya) al periodista JOSÉ MARÍA PORTELL MANSO, cuando no habían pasado ni veinticuatro horas del asesinato en San Sebastián del policía Francisco Martín González. Dos etarras le dispararon varios tiros de pistola a bocajarro cuando se disponía a arrancar su coche, aparcado frente a su casa de la calle Muelle de Churruca.

No me rindo

 

Sin miedo contra ETA y frente a la cobardía política

«Han matado a mi amigo, han matado a mi amigo». Así lloró, con toda la pena de sus nueve años, Santiago Abascal cuando supo por televisión que ETA había asesinado a Estanis, el cartero de su pueblo. Era el 26 de junio de 1985 y ese día tuvo por primera vez el sentimiento de pertenencia a una comunidad: la de las víctimas del terrorismo; sentimiento que le avivarían en casa ˗donde nunca le ocultaron la verdad, el mejor antídoto contra el miedo˗ al mostrarle las cartas de extorsión que la banda había enviado a su abuelo. Se trataba solo del comienzo, de una campaña que años después eclosionaría en amenazas, ataques al negocio familiar e intentos de asesinato. Pero los terroristas no lograron que los Abascal perdiesen su alegría de vivir, o se sintieran extranjeros en su patria o arriasen la bandera. Resistieron, como tantos en el País Vasco, no porque fueran héroes o locos, sino porque era su deber.

La derrota del vencedor

 

¿Ha sido realmente derrotada ETA? ¿Quiénes son los vencedores y quiénes los vencidos después de centenares de asesinados y miles de víctimas? Frente al relato dominante sobre el final de ETA, Rogelio Alonso aporta claves imprescindibles para comprender este decisivo periodo de la Historia de España y demuestra que la derrota del terrorismo nacionalista ensalzada por el discurso oficial constituye, parafraseando a Hannah Arendt, una "mentira política organizada". 

Esta investigación revela, como Primo Levi advirtió tras la caída del nazismo, que mediante "verdades consoladoras" se "niega la existencia de las cosas que no debían existir", ocultándose gran parte de la realidad sobre el final de ETA para encubrir graves negligencias y errores políticos. 

Explica con rigor por qué muchas víctimas y amenazados por ETA se formulan una pregunta demoledora: ¿mereció la pena su sufrimiento cuando las enormes injusticias infligidas sobre ellos quedan amortizadas con un final que falsea la memoria de lo que realmente han vivido y ha ocurrido? 

Para su análisis, el autor se ha basado en el estudio exhaustivo de informes confidenciales y reservados elaborados por el servicio de inteligencia español y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, documentos inéditos hasta ahora sobre la política antiterrorista y sobre ETA; así como en entrevistas con víctimas y responsables políticos y policiales de la lucha contra la organización terrorista.

Años lentos


A finales de la década de los sesenta, el protagonista, un niño de ocho años, se va a San Sebastián a vivir con sus tíos. Allí es testigo de cómo transcurren los días en la familia y el barrio: su tío Vicente, de carácter débil, reparte su vida entre la fábrica y la taberna, y es su tía Maripuy, mujer de fuerte personalidad pero sometida a las convenciones sociales y religiosas de la época, quien en realidad gobierna la familia; su prima Mari Nieves vive obsesionada por los chicos, y el hosco y taciturno primo Julen es adoctrinado por el cura de la parroquia para acabar enrolado en una incipiente ETA. 

El destino de todos ellos –que es el de tantos personajes secundarios de la Historia, arrinconados entre la necesidad y la ignorancia– sufrirá, años después, un quiebro. Alternando las memorias del protagonista con los apuntes del escritor, Años lentos ofrece además una brillante reflexión sobre cómo la vida se destila en una novela, cómo se trasvasa el recuerdo sentimental en memoria colectiva, mientras su escritura diáfana deja ver un fondo turbio de culpa en la historia reciente del País Vasco.

Los niños de Lemóniz

Mucho se ha hablado del terrorismo de ETA en las décadas de los 70 y 80, pero nunca se había escrito esta historia desde la mirada limpia e inocente de los niños cuyos padres estaban amenazados o fueron asesinados por la organización terrorista. La autora fue uno de esos niños que al igual que otros, vivió unos acontecimientos que ningún niño debería vivir jamás. 

El testimonio novelado Los niños de Lemóniz es la suma de recuerdos recuperados. Habla de personas, emociones y situaciones, pero sobre todo habla de niños, de cómo ellos vivieron esa realidad, de cómo sus padres, ante situaciones límite, intentaban ocultar lo que estaba ocurriendo con el único objetivo de protegerlos. Niños que nunca fueron tenidos en cuenta, ni siquiera en las estadísticas. Y también habla de mujeres, de madres que, a pesar de su juventud, fueron extremadamente valientes, generosas, protectoras y luchadoras.

Los ausentes


 País Vasco, 2007. Tras el fracaso de la última tregua, ETA prepara un nuevo golpe para demostrar su cuestionada fortaleza. Dos encapuchados secuestran a punta de pistola a Bixen Alzola, profesor de universidad y defensor de la vía pacífica como única alternativa para solucionar el conflicto vasco. Cuando su mujer, Leire, recibe la llamada de la organización terrorista reivindicando la acción, siente que su mundo se resquebraja. Sabe que las posibilidades de que su marido salga indemne son mínimas. Durante esa larga noche, Leire toma una decisión: hará todo lo que esté en su mano para salvar la vida de su marido.

¿De qué será capaz? ¿Hasta dónde está dispuesta a llegar? Y ¿qué precio va a pagar por ello? Porque ya nada será igual. No hay vuelta atrás. Nunca la hay cuando se traspasan  ciertos límites.

Los ausentes es una novela sobre la violencia, violencia que paulatinamente irá arrastrando a todos los personajes, sin que nadie, ni nada, logre detenerla.

El padre de Caín - miniserie


Inspirada en hechos reales y basada en la novela homónima de Rafael Vera, secretario de Estado de Seguridad entre 1984 y 1994, ‘El padre de Caín’ se centra en la historia de Eloy, teniente de la Guardia Civil cuya obsesión es la lucha antiterrorista. Demócrata y aventurero, escogerá como primer destino voluntario el cuartel de Intxaurrondo en una agitada San Sebastián en la que los ametrallamientos, los tiros en la nuca, los coches bomba y los ataques con mortero están a la orden del día. Por este motivo, deja a su joven esposa en un Madrid pregolpista para enfrentarse a la persecución abertzale y a la violencia etarra. Sin embargo, en medio de esa atmósfera de terror y miedo descubrirá un amor inesperado. Cuando concluye su destino en la capital guipuzcoana, Eloy regresa a Madrid, donde retoma su vida familiar. Un suceso inesperado le obligará a regresar a Euskadi 20 años después, donde se reencontrará con un pasado que marcará su vida hasta el extremo.

Sangre, sudor y paz: La Guardia Civil contra ETA


Su asunto, el nacimiento, auge, caída y extinción forzada de uno de los grupos terroristas más letales y persistentes del último siglo en Europa Occidental, está narrado desde un lado de la grieta que su actuación provocó en el seno de las sociedades vasca y española: en particular, desde el lado de quienes lo combatieron y finalmente lo redujeron a la más absoluta inoperancia. Esta es, por tanto, la historia de la lucha contra ETA tal y como la vivieron los guardias civiles y sus familias: el colectivo más golpeado por la acción de la banda —con más de doscientos muertos y muchos centenares de heridos—, y también aquel que acabó demostrando un compromiso mayor en su neutralización y liquidación.

A partir de la memoria acumulada por aquellos que asumieron, a lo largo de medio siglo largo, el desafío de acallar las armas de quienes empezaron luchando contra una dictadura y acabaron desestabilizando la democracia, este libro tiene como ambición contribuir a la inexcusable derrota literaria del terror y construir la memoria debida de una historia crucial para entender la España contemporánea. Una historia, además, de éxito, el de un Estado, sus ciudadanos, sus leyes y sus instituciones frente a un reto endiablado y por momentos tan angustioso como desesperante. La historia, en fin, de un logro policial sin parangón en nuestro entorno, conseguido a partir del sudor y la sangre que en las coyunturas adversas forman parte del precio de la paz.

El refugio de los canallas


El refugio de los canallas es la novela de madurez del veterano escritor y columnista de prensa bilbaíno Juan Bas.
Mediante una conseguida estructura y un ritmo narrativo rápido, la novela salta en el tiempo constantemente, adelante y atrás, entre 1946 y 2015, para dar vida y muerte a una pluralidad de personajes contrapuestos y tocados por una gratuita tragedia.
El refugio de los canallas trata con fuerza el tema shakespeariano del odio irresponsable que unos padres infundieron en sus hijos hasta causar la destrucción de todos ellos. Del sinsentido y la estupidez cruel, despiadada, autista y endogámica que fue la larga lacra de ETA, así como de la existencia de un GAL esencial y terrible con una bajeza moral comparable a la de la banda. Y trata en definitiva de la razón de Estado cuando transita por secretas cloacas; y del patriotismo, que a veces es el último refugio de los canallas y otras, el primero.
"Juan Bas ha compuesto con notas crudas y buena escritura una compleja polifonía de víctimas que ayer fueron verdugos, de verdugos que más tarde serán víctimas o que ya los son aunque acaso no lo sepan." 
Fernando Aramburu, autor de Patria

Una tumba en el aire

 
La noche del 24 de marzo de 1973, tres jóvenes españoles, Humberto, Fernando y Jorge, cruzaron la frontera francesa para ir a Biarritz a ver la película El último tango en París, entonces prohibida en la España franquista. Se sabe que esa noche entraron en una discoteca y allí los esperaba un cruel destino. Confundidos por policías por un grupo de miembros de ETA, fueron secuestrados, torturados y asesinados. Nunca más se supo de ellos. 
Sus cuerpos nunca aparecieron. Pero siempre hubo un punto débil. Esta novela se inspira en los hechos reales para contar, con escrupulosa verosimilitud, la historia de aquel fatídico encuentro. Escrita con un sobrecogedor pulso narrativo, Adolfo García Ortega relata en ella las vidas truncadas de aquellos jóvenes y las de sus verdugos, a la vez que muestra la atmósfera social y política que se respiraba en 1973 en el sur de Francia, donde los terroristas, considerados gudaris de una quimera revolucionaria, se preparaban para intervenir sangrientamente en la dictadura de España. 
Novela certera y conmovedora, en la tradición de Truman Capote y Graham Greene, Una tumba en el aire es una magistral pieza literaria que deja al lector estremecido. Su autor, en estas páginas, como ha hecho en otras de sus novelas, no rehúye la justicia ni la ternura y abre la puerta a una posible verdad sobre unos hechos nunca aclarados.

Como si todo hubiera pasado

 
El presente volumen recoge 42 cuentos, escritos entre 1999 y 2018, sobre el conflicto vasco o lo que Zaldua y sus amigos llaman 'La Cosa'. Escritos en euskera, muchos de ellos se publican ahora por primera vez en español traducidos por el propio autor. 

En palabras de Edurne Portela en el prólogo que abre el libro, 'aportan algo singular e irrepetible: nos adentran en la historia cuando la historia era presente. Nos dan una visión de 'La Cosa' desde el día a día, desde dentro, prestando atención a veces a los grandes eventos -alguna de las treguas de ETA, algún asesinato reconocible como el de Miguel Ángel Blanco-, pero sobre todo desvelan lo que suponía vivir cotidianamente con la violencia. Zaldua nos traslada a ese pasado que cada vez se nos hace más ajeno a través de cuentos que revelan la complejidad de la sociedad vasca, los vínculos afectivos, la cercanía que podía haber entre actores muy diferentes del conflicto, las tensiones sociales que a veces se daban de forma abierta -una manifestación contra una acción de ETA y una contramanifestación a favor- o soterrada -una conversación entre amigas en la que prefieren no tocar el tema político-.

 Zaldua abre una ventana a la relación de la sociedad vasca con la violencia, llegando en la última sección a este tiempo post-ETA, en el que su mirada, algo cáustica, muestra los retos presentes: la dificultad de afrontar el pasado, la construcción de relatos interesados, la fragilidad de la memoria'.

jueves, 3 de marzo de 2022

Bildu sigue cerca de ETA: reunión en prisión entre un senador abertzale y la última jefa de la banda

ALFONSO EGEA - 03/03/2022 - Fuente OKDiario

Si en público los dirigentes y componentes de la formación política abertzale EH-Bildu juegan a la ambigüedad a la hora de referirse a ETA, sus encarcelados, y al terrorismo que durante más de 40 años azotó al país, en privado su comportamiento es absolutamente distinto. OKDIARIO ha sabido que la que es considerada una de las últimas jefas de la banda terrorista, Iratxe Sorzábal, recibió una visita especial el pasado 3 de febrero en la prisión madrileña de Estremera. El senador de EH-Bildu, Gorka Elejabarrieta, estuvo con ella desde las 09:30 de la mañana hasta cerca del mediodía. Esta visita se produjo sólo unos días antes de que la etarra fuera condenada a 24 años de cárcel por dos atentados cometidos con explosivos en Gijón en 1996.

martes, 1 de marzo de 2022

Todos los futuros perdidos

 

Un libro lleno de valentía, honestidad y verdad.

Este libro comienza con el recuerdo de un día feliz, el 20 de octubre de 2011, en el que la banda terrorista ETA anunció su cese definitivo. Diez años después de aquella fecha histórica, un centenario caserío en Aretxabaleta, cercano a Mondragón, albergaba esta emocionante conversación sobre uno de los episodios más oscuros de nuestro pasado reciente.

Eduardo Madina y Borja Sémper eligieron un simbólico cruce de caminos en el corazón de Euskadi porque la suya es una historia de vidas paralelas con muchos puntos de conexión. Nacidos en Bilbao e Irun con apenas unas horas de diferencia, su compromiso les convirtió desde muy jóvenes en objetivos de la violencia. Ambos vivieron los años más duros del terrorismo en primera línea y desde distintas formaciones políticas. Nunca se plantearon renunciar, a pesar del coste que supuso en sus vidas.

Todos los futuros perdidos es un conmovedor testimonio contra el miedo, el silencio y el olvido. Un libro imprescindible que reivindica la memoria colectiva de un pasado que no debió existir al tiempo que celebra la mayor de las victorias, la de todos los futuros que se ganaron.

Víctimas: La historia de ETA - Cachorros del terrorismo

E.T.A. ha ido creando a su alrededor una serie de movimientos sociales, culturales, sindicales y mediáticos con los que ha conseguido atemorizar a la sociedad vasca. Es lo que se ha denominado el entorno etarra. Profesores, policías, estudiantes, concejales, curas, comerciantes, ertzainas... Cualquiera puede convertirse en objetivo de los terroristas. Hay quienes no han soportado la presión y han abandonado el País Vasco. Otros, no tienen más remedio que vivir con la sombra de sus escoltas.
   

 El 7 de mayo del 2000 José Luis López de Lacalle, columnista de El Mundo del País Vasco fué asesinado por ETA en la puerta de su casa. Los periodistas se convierten en blanco de las balas terroristas. Falta de libertad de expresión, amenazas, y guardaespaldas son palabras comunes en el relato de aquellos que viven aterrorizados por decir lo que piensan. En este capítulo intervienen Carlos Herrera, Luis del Olmo, Gorka Landáburu y Luis María Anson pero además se produce un encuentro inédito: Pedro J. Ramírez se encuentra cara a cara con el etarra que intentó asesinarle 20 años atrás, Juan Manuel Soares Gamboa.  

 El 12 de julio de 1997, Miguel Ángel Blanco, concejal del PP en Ermua, moría en un bosque de Lasarte. Habían pasado 48 horas desde que que ETA planteara el chantaje más cruel a las instituciones. La muerte del joven concejal desencadenó la reacción popular contra la banda terrorista más multitudinaria de la historia.  

 El 22 de marzo de 2006 E.T.A. declara un alto el fuego permanente. Las esperanzas de muchos españoles se centran en el deseo de que E.T.A. desaparezca para siempre. Otros ven en este proceso de paz una traición al sufrimiento causado por los 47 años de muerte y dolor que ha sembrado la banda terrorista a lo largo de su historia, en la que también hubo otras treguas. Siempre rotas con una víctima más.